Creemos en una belleza natural, que busca realzar las belleza de cada persona
Las nuevas tecnologías y las redes sociales han hecho que se popularice el estilo de vida “fast”.
Hemos caído en las garras de la velocidad, la inmediatez.
Nos hemos vuelto adictos a un ritmo de vida acelerado del que hay que salir.
¿La respuesta? El movimiento slow life.
Slow life es reconectar con nosotros mismos y con nuestra esencia. Tomar conciencia de cada segundo de nuestra vida y saborearlo. Hay lugares que nunca lo han abandonado.
Uno de esos lugares es la Costa Brava: nuestra tierra, ese trocito de paraíso donde se fundó KIN Cosmetics en 1932.
Pero nuestro modo de entender la vida no hace que nos olvidemos de los pilares que nos han hecho llegar hasta aquí…